"En términos sencillos, la ley del karma dice que las acciones mentales y físicas de una persona determinan el progreso de su vida en la tierra. Las acciones que acomete, tanto las buenas, como las malas impactan su vida en varias maneras durante el curso de ésta. Las malas acciones le llevan al sufrimiento y la infelicidad, mientras que las buenas, a la felicidad y al éxito espiritual".
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"Sea lo que sea que plantes con tus acciones vuelve a ti. Si haces a otros felices a través del servicio, la caridad y la amabilidad, plantas felicidad como si fuera una semilla, y te dará el fruto de la felicidad. Si haces a otros infelices a través de las palabras duras, los insultos, los actos crueles, la opresión, etc, plantas la semilla de la infelicidad y te dará el fruto de la pena, el sufrimiento, la miseria y la infelicidad. Esta es la inmutable ley del Karma.
Hoy me he encontrado un pajarito entre los dos coches, en el suelo...bueno, lo ha encontrado Ginger. Estaba tan congelado que no podía volar, no parecía que tuviera nada roto. Lo he metido en casa, lo he puesto al lado del radiador en una cestita que parece un nido. He entrado varias veces a verlo y estaba allí, sin moverse. Me disponía a ir a la tienda a comprar alpiste cuando he entrado a verlo y ya estaba listo para marchar. Se me ha subido por todas partes, en la cabeza, en los hombros, en las manos...estaba como loco de contento. Lo he sacado al jardín y se ha ido volando a un árbol y se ha quedado un rato allí cantando...cantándome. O eso he querido creer. Los budistas dicen que una de las cosas que más elevan el buen karma es liberar a un pájaro. Hoy he entendido por qué.
