Ya estamos otro año más

Y ya estamos otra vez. Es la época del año en que empezamos los ensayos para el programa de radio. Vuelvo a ser Corona Miller...yo, que no bebo cerveza. Es un programa de radio a la antigua usanza, con su radionovela, sus anuncios y sus gags. Esta vez es un musical, así que además de leer mi papel, canto...que bueno, después de todo...es lo mío. Ya volvemos a los nervios, aunque esta vez lo llevo mucho mejor, ya veremos cuando se vaya acercando el día. De momento, guardaré la reseña del anuncio en el periódico porque me hace ilusión.

Y esto también me gusta mucho

Y sigo contando cosas que me gustan mucho...qué quereis que os diga...he estado pensando...jo, y esto y esto...así que ahí va la segunda parte.

- Adoro estar con mis hijos. Con los dos, y si ya estoy con los dos a la vez, eso es la caña. Hace unos años (yo ya vivía en USA) estuvimos paseando en Navidades por la Plaza Mayor y alrededores los tres solos y lo recuerdo como uno de los momentos más felices de mi vida. Nadie me hace reir como ellos.

- Me vuelve loca bailar....creo que cada vez más.

- Me gusta muchísimo hacer la compra. Mi lugar favorito para ello es un mercadillo, pero como aquí no hay, me gusta mucho ir al súper. De hecho me encanta ir a supermercados nuevos en sitios nuevos. Me podría perder durante horas en ellos. A mi marido también le encanta y a veces es como ...deja, que tú trabajas y yo no, así que voy yo...no, no si a mí me pilla de paso, ya voy yo...así que vamos mucho a la compra juntos.

- Me encanta escribir con un buen boli. Uno de esos que va muy rápido.

- Me encanta desaparecer un par de horas el domingo. Como aquí no cierra nada, pues me voy a esta tienda y luego a la otra y luego a mi tienda de productos naturales... vivo en una ciudad pequeña, así que me encanta ir de aquí para allá en mi coche... y sin problemas de aparcar.

- Me gustan los juguetes de McDonalds. Las hamburguesas, patatas, etc son una mierda, pero los juguetes que dan con el Happy Meal, se salen.

- Me gusta el espíritu de mi madre, que tiene casi 80 años, se lo pasa bomba con todo, todos la quieren y siempre que le preguntas te dice que está "fenomenal gracias a dios". Me gusta la gente que tiene buen rollo, aunque tengan problemas, achaques o lo que sea que tengan.

- Me gustan los perros, porque -como los niños- viven el momento. Ojalá pudieramos conservar eso y no vivir en lo que va a pasar mañana o lo que pasó ayer.

- Me gusta leer por las noches en la cama. Siempre leo tres cosas: El libro de ficción que esté leyendo, un guru-libro y una revista de salud.

- Y sobre todo, me gusta que me gusten muchas cosas.

Pues esto es lo que a mi me gusta

- Me gusta llegar a casa cuando nieva fuera y la cocina tiene los cristales empañados porque hay algo haciéndose en el horno.

- Me gusta cuando mis perras me reciben por la mañana.

- Me gustan los juegos de ordenador...me relajan.

- Me encanta el regaliz negro. Me gustaba tanto de pequeña que el pipero ya se negaba a venderme más. Luego hacía la caca negra.

- Me encantan mis nietos. Los tres.

- Me encanta poner el agua lo más caliente que puedo aguantar.

- Me encanta la pizza para desayunar, aunque no la tome nunca.

- Me gustan mucho los bocadillos de boquerones en vinagre.

- Me encanta sudar y después ducharme...pero no sudar así normal, que me parece una guarrería, sino sudar haciendo ejercicio...ese sudor que es como agua, que no huele.

- Me gusta mucho montar en bici, porque siento que es como volver a ser niña.

- Me encanta que alguien me reconozca porque me ha visto cantar en algún sitio. La fama debe de ser un rollo, pero a mi escala, mola...mola mucho.

- Me encanta comer por la calle. No sólo helado sino un bocadillo de calamares. Sabe mucho más rico. También me encanta comer sandía en la playa.

- Me encanta cuando mi marido me guiña un ojo. Bueno, la verdad es que me encanta la gente que guiña un ojo.

- Me encanta mi casa y el lugar donde vivo. También mi marido, mis hijos y mi trabajo. Por eso soy tan feliz.

- Me gusta la gente que se molesta en decir mi nombre, que para los americanos es muy difícil.

- Me encantan los libros de cocina, sobre todo si son de cocina étnica o un poco rara, aunque luego nunca cocine nada especial. También me gustan los sitios de cocina en internet.

- Me encanta surfear todo lo que suene guru...cocina, nutrición, ejercicio...

- Me encanta pensar que en menos de 2 semana cumpliré 50 años. No entiendo a la gente que no se alegra de cumplir años. A mí me gusta mucho cumplirlos.

- Me encanta achuchar a los niños...y a los perros.

Bueno, esas son algunas de las cosas que me gustan, aunque no por orden de importancia.

La postura del árbol

Estoy suscrita al reto diario que me manda una revista de internet que se llama Whole Living (algo así como vida plena). Bueno, pues me mandan todos los días un reto, algo que yo tengo que decidir (y votar) si lo acepto o no. La verdad es que casi todos los retos ya los hago, porque como ya sabeis, me va la vida sana. El de hace unos días era, por ejemplo, "hoy voy a desayunar" y yo claro, vote que sí lo aceptaba, porque yo desayuno no sólo ese día, sino todos los días. El de ayer era "hoy voy a ser emocional" y yo me pregunté "ejem... ¿más aún?", pero dije que sí, que vale. Pero resulta que el de hoy dice: "hoy voy a intentar estar equilibrada" y tengo que conseguir la postura del árbol.

Y ahí es donde lo llevo crudo, porque yo soy muy elástica, pero bastante patosa...pero bueno, allá voy y en cuanto termine de escribir, lo voy a intentar y yo los retos me los tomo muy en serio, como cuando jugaba cuando era pequeña...¿verdad o atrevimiento?

En busca de la suerte perdida

Leo en la revista "Redes" las conclusiones del estudio de un científico británico llamado Wiseman...sí, muy apropiado el nombre (significa "hombre sabio"). Estas son, más o menos:

- Las personas "afortunadas" suelen introducir variedad en sus vidas de forma consciente y constante. Si siempre hablas con la misma gente, tienes el mismo trabajo y te mueves por los mismos lugares, es difícil que algo cambie...que tu suerte cambie.

- Las personas que se consideran afortunadas tienden a ser menos ansiosas, por lo que "ven" cosas que los que se consideran desafortunados, al estar más en tensión, simplemente no ven. Esto les hace perder oportunidades.

Etc, etc...

Así, Mr. Wise llegó a la conclusión...después de 10 años de estudiar a la misma gente, que la persona va a la suerte y no, la suerte a la persona.

El 80% de los que se consideraban desafortunados dijo haber cambiado su destino en un año, después de asumir que tenían que cambiar el chip y estar abiertos a las oportunidades nuevas que la vida les brindaba...esas oportunidades que los optimistas veían antes y ellos no.

Carta de una profesora

El síndrome Belén Esteban

Como profesora, las preguntas de los alumnos que más me cuestan responder convincentemente son sobre por qué hay que estudiar cosas que a ellos les parecen inútiles o absurdas, como la Historia o la Geografía. Yo tengo claro qué me aportan a mí, pero de todas las razones que hay para estudiar estas cosas, yo les hago hincapié en lo necesarias que son estas disciplinas para comprender el mundo en el que viven: las coordenadas de espacio y tiempo, que al fin y al cabo son las que tratan la Geografía y la Historia, nos ayudan a conocer el sitio que ocupamos en el mundo y a comprender de dónde vienen nuestras realidades. Que todo eso les puede parecer ajeno y absurdo, pero que muchas de las cosas que estudian tienen que ver con su vida real y que quieran o no, les afectan.

Por ejemplo, ¿quieres saber por qué tienes a tu lado a un compañero que viene de Ecuador? ¿por qué habla el mismo idioma que tú? ¿quieres entender por qué un señor, por nacer con el apellido Borbón, va a ser "rey"? ¿por qué lo que digan unos señores europeos en Bruselas va a repercutir -y mucho- en tu vida? Todo eso es Geografía. Todo eso es Historia.

Algunos esntienden qué quiero decir. Otros no. Yo no llevo mal las preguntas, las protestas...son críos. Es normal. Donde me desarman del todo y me dejan sin respuestas es cuando me dicen que todo les da igual. Que para qué quieren saber dónde está Marruecos, si no van a ir nunca. Para qué conocer el tipo de elcciones que hay en España, si ellos no tienen la intención de votar jamás. Que les resbala que haya una guerra en Irak, que media Africa se esté muriendo de hambre o que la Unión Europea diga "bla". Si ni siquiera les interesa eso, imaginaos lo complicado que me resulta hacer que se interesen por lo que hacían señores de hace cinco siglos. por muy apasionante que yo intente pintarlo.

Y lo que llevo peor, con diferencia es esa actitud de orgullo con la que exhiben su ignorancia y su cortedad de miras. Esa actitud de "no sirve para nada, no me interesa. Eso que cuentas y a lo que dedicas tu vida es una mierda. Yo quiero jugar a la Play/irme de compras al Centro Comercial y ya". La tienen conmigo, que enseño Historia, pero también con los profes de Lengua, de Biología, de Matemáticas. El desprecio por los libros, por el Arte, por la Cultura, por las Ciencias...no es algo tan raro...y puede conmigo.

Ultimamente esa actitud está más de moda que nunca. Tenemos una perfecta encarnación en la dichoda Belén Esteban, que no sabe nada, no quiere saber nada, y se jacta de ello. La mala educación, la zafiedad y la ignorancia puestos en un pedestal día tras día. Todo el mundo la aplaude porque ella es "auténtica" (signifique lo que signifique eso). Conozco a mucha gente a la que le gusta ver a la Esteban y es curioso, porque hay todo tipo de personas entre su público. Entre ellos, los que más me llaman la atención son dos tipos: la gente que tiene ( ocree que tiene) más educación que ella, y la ve como un divertimento, incluso algunos como un consuelo (yo soy mejor que ella), o los que son como ella, que han visto como la ignorancia y la mala educación también te pueden hacer triunfar en la vida y que hay que sentirse orgulloso de ello. Eso me da miedo: que se extienda y que sirva de ejmplo a más bobos, que opinen que el no saber nada es estupendo. Que el presumir de ser zafio e inculto se convierta en políticamente correcto y sea bien visto.

"Eh, que yo no quiero ayuda de nadie, que no necesito ayuda, leche" dice la Esteban en un momento de estos cuatro minutos de despropósitos. "Como yo no he pillado esa revolución -la industrial- tres narices me importa" - un argumento que podría haber empleado uno de mis peores alumnos.

En fin...lo grande es que estoy convencida de que la mayor parte del público (y muchos de los de las mesas) no tenían ni idea de que la chica estaba metiendo la zarpa hasta el fondo y más allá y reían y aplaudían porque lo decía el regidor.

Entendédme: yo no critico a la gente que no sabe. Yo no sé mucho de tantísimas cosas...tampoco creo que tenga que ser motivo de verguenza * el no haber estudiado, el no hablar correctamente o el tener lagunas de conocimiento, Lo que me revienta es la actitud contraria, la exhibición con orgullo de la ignorancia y el menosprecio a cualquier cosa que huela a sapiencia. Me duele el desprecio a la educación, en todos sus sentidos. Me duele...y me da una pena que me muero.


Esta es una carta de una profesora que me ha llegado en un email. Me ha parecido buena idea compartirla. El asterisco es mío porque no sé cómo poner la diéresis en mi teclado americano.

Hoy he empezado el día muy mal. Me sentía morir con este dichoso catarro. Pero he pensado :"Tengo dos caminos. O me siento miserable todo el día o me recupero". Me he ido a andar con Jim los 5 kms de rigor y todo ha cambiado. Hacía un día demasiado bonito como para sentirse asqueada.
Cuando he vuelto, he hablado con Pati que se iba al cine, me ha llamado Jaime y he hablado con Augie, que me ha puesto al corriente de nuestros conciertos para el fin de semana...y por los dos nos pagan...sí señor...un día demasiado bonito para perdérselo.

Patética

Sí señor, eso es lo que soy. Anoche me fui a cenar a casa de una gente. El sitio era indescriptible...la casa preciosa. La casa está enmedio del bosque, pero en lo alto, así que puedes ver todo el bosque a tus pies. Antes de la cena estuvimos fuera, y la verdad es que se estaba muy bien y no hacía frío....pero debe de ser que como se estaba muy bien, yo no notaba el fresco del otoño polar y esta mañana me he levantado con un trancazo de narices. El segundo en los siete años que llevo aquí, lo cual no está nada mal.
Además, hoy hace un día asqueroso, frío y lluvioso...miserable, vamos...pero yo decido hacer de tripas corazón y después de estar un par de horas con Aaron, en los que sobrevivo diciendo...vamos a jugar a que estábamos aquí en esta colchoneta en el suelo, pero la moqueta era el mar y teníamos que escapar de los tiburones. Por supuesto, no me ha dejado parar un segundo he incluso he acabado con su pie en mi boca varias veces, pero decido que no pasa nada y que no voy a dejar que las circunstancias adversas me estropeen un sábado. Por fin viene su madre a buscarlo y decido ir a la biblioteca a sacar unos dvds.
Después de mucho mirar me decido por:

-Amélie
-Slumdog millionaire
-Fit in your jeans by Friday (o cómo conseguir un tipín maravilloso para el viernes a base de machacarte con Kim Kardashian)

Jim me copia el del tipín pero decido pasar de ese hoy...pues está mi cuerpo como para Kim Kardashian hoy...y me decido por Amélie. En estos momentos (una vez al año) es cuando echo de menos tener una tele enmedio del salón con un mando a distancia y atocinarme, así que como no puedo hacer eso y la veo en el ordenador, decido que seguiré viéndola mañana, que espero tener un cuerpo más jota y quién sabe...a lo mejor hasta me atrevo con la Kim.

Born to be wild

Con mi camiseta de Harley Davidson y el tatuaje que se ha empeñado Aaron en ponerme (una salamandra) ya soy lo que siempre he querido ser...una chica dura.

Amen

Mi hermano Eduardo me ha mandado la columna que escribió para su periódico cuando terminó la serie "Perdidos". Me ha parecido preciosa, así que os la copio. (No te preocupes, Luismi, porque no te cuenta el final).

Náufragos del cielo

Con una maratoniana sesión de madrugada, ayer terminó la serie "Perdidos". Y como diría Jack: "lo que pasó, pasó", aunque no sea exactamente así. No voy a desvelar el final porque muchos lectores lo verán este domingo, ya en su versión doblada. ¿Me gustó? Me ha entusiasmado. Adiós a la isla. Adiós a los universos alternativos por los que deambulaban - ¿o no? sus protagonistas. En la realidad paralela, el Real Madrid ha ganado la liga y usted no es oficinista, sino astronauta, el allá es diferente al aquí. Sin embargo, según hemos aprendido con la serie, el amor tiene sus constantes, sus propias leyes de causa y efecto, y hay personas cuyo destino es encontrarse, y sólo así desaparecerá de sus vidas la sensación de estar perdidos. Esto de las existencias alternativas no me parece una teoría tan descabellada, cuando me presentaron a mi mujer la espeté enseguida: "Oye, no habremos sido novios en una vida anterior?". En definitva, una gran serie, cuyo épico final encuentro más deudor de "El Señor de los Anillos", y su viaje a los Puertos Grises que de "Regreso al Futuro". Un avión que se quiebra en pleno vuelo, una isla que se mueve, el mal como fuerza, el amor como enigma, el perdón como solución, una iglesia que actúa de nexo de unión entre todos...Personalmente, no me importa si muchas preguntas han quedado sin responder, pues la mayor de todas sí ha quedado resuelta: el amor lo es todo. Si fueron seguidores de la serie, pero dejaron de verla, hagan las paces con ella y no se pierdan éste último episodio donde hay una poética escena coral, que justifica la espera. "Lo que pasó, pasó" hemos visto insistir a Jack y a otros personajes. Sí y no. Feliz retorno a casa a los perdidos. Feliz retorno a los náufragos del cielo.

Madrid. Agosto. Abril.

Estas son fotos que saqué a mi nieta Abril este Agosto en Madrid.